Cultivo de micoplasmas
Es una prueba para detectar microorganismos llamados micoplasmas en una muestra de secreciones de la zona genital.
Los micoplasmas son los organismos libres más pequeños. No son bacterias ni virus. No tienen paredes celulares. Pueden tener muchas formas diferentes.
Hay tres especies de micoplasmas que están muy relacionadas. Son las siguientes: Mycoplasma hominis, Mycoplasma genitalium y Ureaplasma spp. Pueden presentarse en mujeres que tienen una infección urinaria, una infección ginecológica, secreción vaginal o enfermedad inflamatoria pélvica (EIP). En los hombres, los micoplasmas pueden estar presentes en algunas infecciones de transmisión sexual (ITS).
Si una persona embarazada tiene estos microorganismos en el canal de parto, el bebé por nacer puede estar expuesto a ellos. Pueden desarrollarse en un bebé durante algunos años. Y causar infecciones que afecten todo el cuerpo.
Para esta prueba, se envía al laboratorio una muestra del cuello uterino, en el caso de las mujeres, o de la uretra, en el caso de los hombres. Allí se vigila para ver si se desarrolla el micoplasma.
Es posible que necesite esta prueba si tiene síntomas de una infección genital o de las vías urinarias. Descubrir la causa de la infección ayuda al proveedor de atención médica a determinar cómo tratarla. Los síntomas en las mujeres incluyen los siguientes:
Dolor en el cuello uterino y la pelvis
Sangrado después de tener relaciones sexuales o entre los períodos menstruales
Secreción vaginal
Los síntomas en los hombres incluyen los siguientes:
Inflamación de la uretra
Picazón y hormigueo en la uretra
Secreción del pene
Sin embargo, no todas las infecciones tienen síntomas.
Es posible que el proveedor de atención médica también le pida las siguientes pruebas:
Análisis de cultivo para detectar otras enfermedades de los genitales y las vías urinarias. Estos pueden ser análisis de gonorrea, clamidia o tricomoniasis, para descartar estas infecciones.
Análisis de reacción en cadena de la polimerasa (PCR, por su sigla en inglés) o de amplificación de ácido nucleico (NAAT, por su sigla en inglés). Estos análisis permiten averiguar la cepa de los micoplasmas. Un análisis de PCR o de NAAT puede ser mejor que un cultivo para encontrar micoplasmas en las secreciones genitales.
Para esta prueba, se requiere una muestra de secreciones de la zona genital. Si usted es mujer, el proveedor de atención médica recolectará la muestra con un hisopo de algodón que le pasará por el cuello uterino. Si usted es hombre, el proveedor de atención médica le colocará el hisopo en la uretra.
Los resultados de la prueba pueden variar según la edad, el género y la historia clínica, entre otros factores. Los resultados pueden ser diferentes según el laboratorio donde se haga la prueba. Es posible que no signifiquen que tiene un problema. Para saber qué significan, hable con el proveedor de atención médica.
Los resultados son normales cuando son negativos. Significa que no se detectaron micoplasmas en la muestra.
Los resultados positivos significan que se detectaron micoplasmas y que es posible que tenga una ITS o EIP. Sin embargo, puede haber algunos micoplasmas sin causar una enfermedad.
Esta prueba no implica riesgos conocidos.
En las mujeres, usar lubricantes y desinfectantes y hacerse duchas vaginales puede afectar los resultados. Al igual que el período menstrual. En los hombres, orinar dentro de una hora anterior a la prueba puede afectar los resultados.
Las mujeres no deben hacerse una ducha vaginal ni usar desinfectantes el día anterior a la prueba. Los hombres no deben orinar 1 hora antes de la prueba. Asegúrese de que el proveedor de atención médica conozca todos los medicamentos, los medicamentos a base de hierbas, las vitaminas y los suplementos que usa. Estos incluyen los medicamentos que no necesitan receta y cualquier droga ilegal que pudiera estar consumiendo.