Sangre en el ojo (hipema) en los niños
¿Qué es el hipema o la sangre en el ojo en los niños?
El hipema es una acumulación de sangre en la cámara frontal (anterior) del ojo. Se encuentra entre la parte frontal transparente del ojo (córnea) y la parte coloreada del ojo (iris). Es por donde el líquido entra al ojo y sale de este. El líquido nutre el ojo y los tejidos que lo rodean.
¿Cuáles son las causas de que haya sangre en los ojos en los niños?
La sangre en el ojo se debe, a menudo, a una lesión en el ojo. También puede ocurrir sin una causa conocida en niños que no tienen otros problemas de salud.
¿Cuáles son los niños que corren riesgo de tener sangre en el ojo?
Esta afección es entre tres y cinco veces más frecuente en los niños que en las niñas. Eso se debe a que los niños se lesionan los ojos con más frecuencia que las niñas.
¿Cuáles son los síntomas de la sangre en el ojo en los niños?
Los síntomas incluyen la presencia de sangre visible en el ojo. Suele ocurrir después de una lesión en el ojo.
Los síntomas de la sangre en el ojo incluyen dolor de ojo, sensibilidad a la luz y visión borrosa. Lleve a su hijo a ver al proveedor de atención médica o busque atención médica de inmediato para obtener un diagnóstico.
¿Cómo se diagnostica la sangre en el ojo en los niños?
El proveedor de atención médica le hará preguntas sobre la historia clínica de su hijo. También le hará un examen de la vista.
¿Cómo se trata la sangre en el ojo en los niños?
La presencia de sangre en el ojo es una emergencia. Si ve sangre en el ojo de su hijo, busque atención médica de inmediato.
El tratamiento dependerá de los síntomas, de la edad y del estado de salud general de su hijo. También dependerá de la gravedad de la afección.
La mayoría de los niños con sangre en el ojo reciben tratamiento en una sala de emergencias. Es posible que lo atienda un proveedor de atención de la vista (oftalmólogo). El tratamiento puede incluir lo siguiente:
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Gotas para los ojos
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Un parche en el ojo afectado
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Reposo en la cama
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Evitar la lectura. Esto se hace para dejar descansar el ojo.
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Elevar unos 30 grados la cabecera de la cama del niño. Así la sangre se asienta en la parte inferior de la cámara frontal (anterior). De esta manera, se puede recuperar la visión más rápido.
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Controlar la presión dentro del ojo del niño todos los días
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Cirugía en los casos graves cuando el tratamiento médico no es eficaz y la presión en el ojo aumenta
¿Cuáles son las complicaciones posibles de la sangre en el ojo en los niños?
Esta afección puede causar algunos de los siguientes problemas:
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El sangrado puede volver a aparecer
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Glaucoma. Es un aumento de la presión dentro del ojo. Los proveedores de atención médica deben observar con atención a los niños con glaucoma. Si no se trata, esta afección puede causar pérdida de la visión o ceguera.
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Pérdida de la visión a largo plazo (permanente)
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Daño en diferentes estructuras del ojo
Información importante sobre la sangre en el ojo en los niños
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Un hipema es la acumulación de sangre en la parte frontal del ojo, entre la córnea y el iris.
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La sangre en el ojo se debe, a menudo, a una lesión en el ojo. Puede ocurrir sin una causa conocida.
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La presencia de sangre en el ojo es una emergencia. Lo más probable es que su hijo reciba tratamiento en una sala de emergencias.
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El tratamiento puede incluir gotas para los ojos, un parche en el ojo, reposo en la cama y elevar la cabecera de la cama del niño.
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Si no se trata, la sangre en el ojo puede provocar pérdida de la visión permanente.
Próximos pasos
Consejos para ayudarlo a aprovechar al máximo la visita con el proveedor de atención médica de su hijo:
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Tenga en claro la razón de la consulta y qué quiere que suceda.
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Antes de la visita, anote las preguntas que quiere hacer.
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En la visita, anote el nombre de los nuevos diagnósticos y de todo nuevo medicamento, tratamiento o prueba. También anote las instrucciones que el proveedor le da para el niño.
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Sepa por qué se receta un tratamiento o un medicamento, y cómo esto ayudará a su hijo. También conozca los efectos secundarios a los que debe estar atento y el momento en que debería comunicarlos.
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Pregunte si la afección de su hijo se puede tratar de otra forma.
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Sepa por qué se recomienda una prueba o un procedimiento y qué podrían significar los resultados.
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Sepa qué esperar si su hijo no toma el medicamento o si no se realiza la prueba o el procedimiento.
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Si su hijo tiene una cita de seguimiento, anote la fecha, la hora y el objetivo de la visita.
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Sepa cómo comunicarse con el proveedor fuera del horario de atención. Esto es importante en caso de que su hijo se enferme y usted tenga preguntas o necesite ayuda.
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