En la quimioterapia (quimio), se usan medicamentos fuertes destinados a destruir las células cancerosas. Los medicamentos atacan y destruyen células que crecen rápidamente, como las células cancerosas.
Pero algunas células normales también crecen rápido. Por lo tanto, con la quimioterapia también se pueden dañar estas células. Esto puede provocar efectos secundarios.
La quimioterapia se puede usar para tratar el cáncer suprarrenal que se ha propagado demasiado como para extirparlo con cirugía. En este caso, no puede curar el cáncer. Pero puede controlarlo.
Es posible que se administre quimioterapia después de la cirugía. Se usa para destruir cualquier célula cancerosa que no se haya eliminado. Esto puede prevenir o retrasar la reaparición (recurrencia) del cáncer suprarrenal.
El mitotano es el medicamento que se utiliza con más frecuencia para el cáncer suprarrenal. Impide que las glándulas suprarrenales produzcan hormonas. Destruye tanto las células suprarrenales cancerosas como las células suprarrenales sanas.
Si tiene menos hormonas suprarrenales, es posible que se sienta muy cansado y débil. Si esto sucede, es probable que le administren esteroides para elevar el nivel de hormonas suprarrenales. El mitotano también puede alterar otros niveles hormonales, como las hormonas tiroideas y la testosterona. Por lo tanto, es posible que también deba tomar pastillas para reemplazar estas hormonas. Se pueden utilizar medicamentos para controlar los niveles hormonales y aliviar los síntomas causados por desequilibrios hormonales. Es posible que deba tomarlos incluso después de finalizar el tratamiento.
El mitotano funciona muy bien cuando el cáncer suprarrenal hace que la glándula produzca demasiadas hormonas suprarrenales. Es posible que no reduzca el tamaño del tumor. Pero puede interrumpir la producción de más hormonas. Esto puede ayudar a aliviar los síntomas.
El mitotano se toma de 3 a 4 veces al día en forma de pastillas. Se lo administrará en su casa. Asegúrese de saber exactamente cuánto, cuándo y cómo administrarlo.
Se pueden usar otros medicamentos de quimioterapia junto con el mitotano para tratar el cáncer suprarrenal avanzado. Estos medicamentos se administran a través de una vía intravenosa en la sangre. Por ejemplo:
Estreptozocina más mitotano
Una combinación de cisplatino, doxorrubicina y etopósido más mitotano
Otros medicamentos para la quimioterapia que se utilizan con menos frecuencia para el cáncer suprarrenal incluyen los siguientes:
Paclitaxel
5-fluorouracilo (5-FU)
Vincristina
Todos estos medicamentos se administran por vía intravenosa y se pueden hacer diferentes combinaciones. También se pueden administrar junto con mitotano.
Los efectos secundarios de la quimioterapia dependen principalmente del tipo de medicamentos que se le administre. Los efectos secundarios más comunes del mitotano incluyen los siguientes:
Malestar estomacal (náuseas)
Vómitos
Diarrea
Sarpullido o cambios en el color de la piel (la piel puede oscurecerse)
Disminución del apetito
Depresión
Mareos
Somnolencia
Lo vigilarán de cerca mientras se le administre mitotano. Informe al equipo de tratamiento sobre cualquier cambio que observe.
Otros medicamentos de quimioterapia pueden afectar el recuento de glóbulos. Por ejemplo, es posible que tenga un mayor riesgo de infección si la quimioterapia provoca una disminución en el recuento de glóbulos blancos. Si tiene algún síntoma de infección durante la quimioterapia, infórmele al equipo de atención médica de inmediato. Infórmeles si tiene fiebre.
Si el recuento de células coagulantes (plaquetas) es bajo, puede sufrir hematomas y sangrar más fácilmente debido a un corte o lesión. Es posible que se sienta más cansado si tiene un recuento bajo de glóbulos rojos.
La mayoría de los efectos secundarios desaparecen poco después de que finaliza el tratamiento. Hay medicamentos que pueden reducir e incluso prevenir algunos efectos secundarios. Pueden ayudarlo a recuperarse de la quimioterapia más rápidamente.
Es importante saber qué medicamentos usa. Anote los nombres de los medicamentos. Pregunte al equipo de atención médica cómo actúa cada uno, para qué sirven y qué efectos secundarios podrían causar.
Hable con los proveedores de atención médica sobre los signos a los que debe estar atento y controlar, y cuándo debe llamar. Asegúrese de saber a qué número llamar si tiene alguna pregunta. ¿Hay una línea telefónica diferente para llamar durante la noche y los fines de semana?
Puede ser útil llevar un registro de sus efectos secundarios. Escriba cualquier cambio físico, de razonamiento y emocional que tenga. Tener una lista por escrito hará que le resulte más fácil recordar las preguntas cuando concurra a las citas. También les facilitará a usted y a su equipo de atención médica colaborar en el armado de un plan para controlar los efectos secundarios.