Un factor de riesgo es todo aquello que aumenta las probabilidades de tener una enfermedad. Los factores de riesgo de algunos tipos de cáncer incluyen el consumo de tabaco, la alimentación y los antecedentes familiares, entre muchos otros. A veces, es posible que no se pueda determinar la causa exacta de un cáncer. Pero los factores de riesgo pueden aumentar las probabilidades de su aparición.
Información útil sobre los factores de riesgo del cáncer:
Los factores de riesgo aumentan el riesgo de una persona, pero no siempre son la causa de la enfermedad.
Algunas personas con factores de riesgo nunca desarrollan cáncer. Algunas personas con cáncer no tienen factores de riesgo conocidos.
Algunos factores de riesgo se conocen muy bien. Pero aún se está investigando sobre los factores de riesgo de muchos tipos de cáncer.
Algunos factores de riesgo, como los antecedentes familiares, no se pueden controlar. Pero hay hábitos que sí se pueden cambiar. Conocer los factores de riesgo le permite hacer elecciones con las que es posible reducir el riesgo. Por ejemplo, si un factor de riesgo es la alimentación poco saludable, podría empezar a elegir alimentos más saludables. Si el exceso de peso es un factor de riesgo, puede querer intentar perder peso.
Cualquier persona puede tener cáncer de páncreas. Pero hay algunos factores que pueden aumentar el riesgo, como los siguientes:
Edad avanzada. El riesgo de padecer este cáncer aumenta a medida que envejece. En menores de 45 años es poco frecuente. La mayoría de las personas tienen 65 años o más cuando les diagnostican este tipo de cáncer.
Género. Los hombres tienen más probabilidades de desarrollar cáncer de páncreas que las mujeres.
Raza. Los afroamericanos y las personas de ascendencia judía asquenazí tienen ligeramente más probabilidades de desarrollar cáncer de páncreas que las personas de otras razas.
Consumo de tabaco. El consumo de cualquier tipo de tabaco (incluido el tabaco de mascar) aumenta el riesgo de este tipo de cáncer.
Obesidad. Las personas con sobrepeso u obesidad tienen mayor riesgo de contraer cáncer de páncreas y de morir debido al cáncer.
Diabetes. Las personas con diabetes de largo plazo, en especial diabetes tipo 2, tienen un mayor riesgo de desarrollar este cáncer.
Pancreatitis crónica. La inflamación a largo plazo del páncreas se relaciona con un mayor riesgo de cáncer de páncreas.
Cirrosis. La formación de tejido cicatricial en el hígado aumenta el riesgo. Esto puede deberse a daños en el hígado por hepatitis o por consumo excesivo de alcohol.
Antecedentes familiares. Las personas que tienen familiares que tuvieron cáncer de páncreas presentan mayor riesgo. Pero la mayoría de personas con cáncer de páncreas no tiene antecedentes familiares de la enfermedad.
Determinados síndromes genéticos hereditarios. Algunos síndromes hereditarios poco frecuentes se relacionan con alteraciones genéticas que se transmiten en la familia. Algunos aumentan el riesgo de tener este cáncer, como el síndrome de Lynch, la pancreatitis hereditaria y el síndrome de Peutz-Jeghers. También se incluyen el síndrome de cáncer de mama y ovario hereditario, el de melanoma familiar con lunares atípicos múltiples, entre otros.
Infección por Helicobacter pylori. Se trata de un tipo de bacteria que puede infectar el estómago y provocar úlceras. Al parecer, aumenta el riesgo de cáncer de páncreas.
Exposición a determinadas sustancias químicas, en especial en el lugar de trabajo. Las personas expuestas a determinadas sustancias químicas en el trabajo, como ciertos tintes, pesticidas, productos de limpieza en seco y benceno, podrían tener un mayor riesgo de desarrollar cáncer de páncreas.
Hay otros factores que podrían afectar el riesgo de cáncer de páncreas. Por ejemplo, una alimentación poco saludable, la falta de actividad física y el consumo excesivo de alcohol. Estos y otros factores de riesgo se están investigando.
Hable con el proveedor de atención médica sobre los factores de riesgo de cáncer de páncreas en su caso. Pregunte qué puede hacer al respecto. Hay algunos factores de riesgo, como la edad, que no puede controlar. Pero hay algunas medidas que puede tomar que podrían reducir el riesgo:
No use ningún tipo de tabaco. Si fuma, intente dejarlo. El proveedor de atención médica puede brindarle ayuda.
Evite el alcohol. Si elige beber alcohol, limite la cantidad a un máximo de 1 trago por día, en el caso de las mujeres, y 2 por día, en el caso de los hombres.
Alcanzar y mantener un buen peso corporal. Seguir una dieta saludable y hacer actividad física hace bien.
Evite la exposición a sustancias químicas que puedan aumentar el riesgo. Si trabaja con sustancias químicas, use equipo de protección.
Una prueba de detección es el proceso de búsqueda de una enfermedad en personas que no presentan síntomas. En este momento, desde ninguno de los grupos médicos importantes en los EE. UU., se recomienda hacer pruebas de detección de cáncer de páncreas en la población general. Sin embargo, si tiene muchos antecedentes familiares de cáncer de páncreas, hable con el proveedor de atención médica sobre las pruebas de detección. O puede preguntar sobre la asesoría y las pruebas genéticas para determinar si tiene un riesgo más alto. Las pruebas de detección podrían ser recomendables en algunas personas con riesgo más alto.
Si el proveedor de atención médica cree que las pruebas de detección serían útiles, podrían hacerle una ecoendoscopia. En esta prueba, se usa un tubo delgado llamado endoscopio que tiene una sonda de ecografía diminuta en el extremo. El endoscopio se introduce por la garganta, a través del estómago y hasta la primera parte del intestino delgado. En una computadora, se usan las ondas sonoras de la sonda para producir imágenes del páncreas en una pantalla. Si se ve un tumor, se puede pasar una aguja pequeña y hueca a través del endoscopio para extirpar trozos pequeños y analizarlos. Esto se denomina biopsia. El proveedor de atención médica también puede usar otras exploraciones de diagnóstico por imágenes, como la resonancia magnética, para revisar si hay cáncer de páncreas.